- Huella digital: se basa en el principio de que no existen dos huellas dactilares iguales, este sistema viene siendo utilizado desde el siglo pasado con excelentes resultados.
- Verificación de voz: la dicción de una (o más) frase es grabada y en acceso se compara la voz (entonación, disptongos, agudeza, etc.), este sistema es muy sensible a factores externos como el ruido, el estado de ánimo... por lo que no es un mecanismo muy adoptado.
- Verificación de patrones oculares: basado en los patrones del iris o la retina y hasta el momento son los considerados más efectivos. La principal desventaja es que es un método intrusivo, las personas son reacias a que les analicen los ojos.
- Verificación Automática de Firmas (VAF): es extremadamente difícil reproducir las dinámicas del trazo de realización de las firmas, aunque el efecto visual final parezca similar. La secuencia sonora de emisión acústica generada por el proceso de escribir constituye un patrón que es único en cada individuo.
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Ojos
(Iris)
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Huellas
dactilares
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Escritura
y firma
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Voz
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Fiabilidad
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Muy alta
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Muy alta
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Media
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Alta
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Facilidad
de uso
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Media
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Alta
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Alta
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Alta
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Prevención
de ataques
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Muy alta
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Alta
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Media
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Media
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Aceptación
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Media
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Alta
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Muy alta
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Alta
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Estabilidad
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Alta
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Alta
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Baja
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Media
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